Pilar Sampedro es una psicóloga con veinte años de recorrido profesional en temas relacionados con la salud psíquica de las mujeres: la violencia de género, las cargas familiares y los dolores crónicos, las dificultades en las relaciones de pareja y la angustia ante la pérdida del amor. Es necesario que el abordaje clínico tenga en cuenta los síntomas específicos que aquejan a las mujeres, y a cada una en particular.

a) Dificultades en las Relaciones Afectivas:
•    Problemas en las relaciones de pareja: sensaciones de tristeza, angustia, frustración, desamor, desamparo y soledad.
•    Dudas sobre la continuidad en la relación de pareja.
•    Celos o desconfianza en la pareja.
•    Dificultad para comenzar o mantener relaciones. Miedo a las relaciones de pareja.
•    Sufrir violencia en la relación de pareja.
•    Problemas en la crianza de los hijos e hijas.
•    Depresiones o angustia después del parto.


b) Dificultades Psicosomáticas:
•    Dolor crónico sin causa orgánica (migrañas, dolores musculares, parestesias).
•    Hormigueo o sensaciones dolorosas en las articulaciones.
•    Fatiga crónica y falta de energía.
•    Dolor en el cuerpo con sensaciones de hipersensibilidad.


c) Dificultades Sexuales:
•    Dificultades con el tema de la orientación sexual.
•    Miedo a las relaciones sexuales.
•    Problemas para alcanzar el orgasmo.
•    Ausencia de deseo o excitación sexual.
•    Dolor o molestias durante las relaciones de penetración.

Una crisis, un duelo, un problema afectivo con el que se convive durante mucho tiempo, un síntoma que te da la lata, pueden ser la  oportunidad que necesitas para analizar lo que no te hace feliz. No se trata de incompetencia o no saber vivir felizmente. Hay que encontrar el sentido de lo que te pasa antes de juzgarte tan severamente.
Cada mujer que acude a consulta es única, por lo que en nuestro centro recibirás una atención específica en función de tu situación y tus síntomas. Recibirás una escucha atenta de tu dolor.

La psicoterapeuta te acompaña en tu proceso, escuchando, potenciando los recursos que tú ya tienes y aportando intervenciones que van a ayudarte a entender y dar sentido a lo que te sucede.
Ayuda a la mujer a que sea consciente de lo que causa el síntoma, que éste síntoma no es el verdadero problema sino lo que está asociado a él. En la terapia la mujer se va dando cuenta de esto y la dirección de la cura la ayuda a hacerse cargo de todo aquello que no sabía y que bloqueaba su deseo.

Dado la variedad de síntomas, situaciones y mujeres, nuestra apuesta es por un modelo que acompaña y acoge a la mujer, ofrece una escucha atenta y profesional, orienta interviniendo cuando la paciente toca aquello que más le afecta, cortando la sesión cuando aparece algo que es importante, analizando sus ideas sobre la pareja, la maternidad y su posición como mujer.

El número de sesiones depende de varios factores: tipo de problema, cronicidad del mismo, tiempo que la mujer lleva padeciendo la dificultad, características de personalidad, actitud ante el tratamiento. Dependerá de la evaluación que realicemos en las entrevistas preliminares y de las necesidades y el compromiso adquirido por la paciente.